En meses pasados, a causa de las intensas lluvias en la región del Salar de Uyuni, las autoridades departamentales restringieron el ingreso a ese atractivo debido a los riesgos para los motorizados.
Incluso, se dio algunos casos en los que la Policía tuvo que acudir al rescate de turistas que quedaron en medio del salar con sus motorizados.
A raíz de ello, la restricción de ingresar al salar implicó que solo se pueda ingresar unos 10 kilómetros, en el borde de la costra salina para permitir que los visitantes se tomen fotografías y luego retornen.
Ahora que las lluvias no están presentes, se tiene la posibilidad de recibir a los turistas para que estén en esta maravilla de la naturaleza.
El secretario departamental de turismo, Marcelo Bartolomé, informa que bajó el agua que existía en el Salar de Uyuni y el atractivo se abre al turismo nacional y mundial.
De acuerdo con los reportes, ahora ya es seguro ingresar hasta el centro de este salar.
Vía: EL PAÍS