El nevado del Sajama cautivó la mirada de propios y extraños que visitan su majestuosidad para intentar llegar a la cima. El flujo de visitantes extranjeros se incrementa en la época más dura del frío, entre abril y junio, de cada año.
Si bien, se constataron que en ocasiones, cascajos del hielo caen a las vertientes de los ríos, éstos potencian su caudal. No obstante, las bajas temperaturas que se registran en el lugar hacen que el grueso del hielo perdure en la cúspide del cerro más alto de la cordillera boliviana.
No obstante, los visitantes también quedan deslumbrados con la naturaleza que envuelve este nevado; con los animales furtivos como el zorro y la vicuña, las alpacas y las llamas que se alimentan de las plantas más resistentes al árido suelo. También con las piezas arqueológicas, festividades locales y miradores. “Con más frecuencia vienen los extranjeros a explorar todos los elementos del Parque Nacional Sajama”, refirió la autoridad.
El flujo de visitantes en este parque aumenta durante los meses más fríos del año; según detalló Gutiérrez, desde abril, recibieron a 753 visitantes, entre nacionales y extranjeros, en mayo 675 y en junio 708. Aunque, las visitas nacionales también suelen ser elevadas durante diciembre y enero, por las vacaciones propias de fin de año y en junio por el receso escolar de invierno.
Los veredictos de quienes llegaron a esta primera área protegida de Bolivia, inspiraron a continuar mejorando la experiencia de nuevos turistas.
CÓMO LLEGAR A SAJAMA
Desde Oruro y La Paz, pueden utilizarse los buses que van a Patacamaya, desde este lugar se toma otro vehículo que partirá durante el mediodía, con destino a la comunidad central de Sajama. Gutiérrez señaló que el viaje, desde ambos departamentos, tiene una duración de 4 horas aproximadamente.
Vía: LA PATRIA