Al mediodía de ayer, las familias bolivianas despidieron a sus seres queridos, que según la tradición llegan el primero de noviembre y se marchan al día siguiente. Los cementerios estuvieron llenos, ya que la gente se trasladó al lugar para hacer rezar en los nichos de sus familiares.
Familias enteras acuden a los cementerios a rezar por los seres queridos y luego de realizar el rezo recibe una compensación en masitas, incluido el pan.
También acuden a los camposantos grupos musicales, que ofrecen sus servicios a la gente, asimismo están los artistas individuales, que con su guitarra despiden al alma hasta el próximo año.
Atención
Entretanto, un trabajo coordinado entre la Subalcaldía Periférica y la Entidad Descentralizada de Cementerios La Paz permitió ayer atender a cientos de personas que se volcaron masivamente al camposanto La Llamita para despedirse de las almas de sus difuntos con una misa.
“Ya estamos despachando a las almitas, les hemos dado una misa como es costumbre para nuestras tradiciones, ya las almitas se van ahora, hemos tenido mucha afluencia de personas, estamos alcanzando entre las 80 mil aproximadamente entre ambos cementerios. Esta despedida la hemos hecho también acá con la subalcaldesa del distrito, todos los dolientes están contentos por todos los arreglos y cambios que se han hecho en el Cementerio de La Llamita”, informó la directora de la Entidad Descentralizada de Cementerios La Paz, Patricia Endara.
Tanto el Cementerio General como La Llamita estuvieron abiertos hasta las 17:00 de ayer. La autoridad edil recordó que estaba prohibido el consumo de bebidas alcohólicas al interior de los camposantos y solicitó respeto a los horarios de visita. En tanto, la subalcaldesa de Periférica, Evelin Gonzales, resaltó el trabajo del personal de su dependencia en el control de la ciudadanía que ingresó al cementerio.
En las zonas aledañas al Cementerio General, los vecinos instalaron mesas para despedir con rezos a sus seres queridos.
Via: El Diario