El Concejo Municipal de Concepción aprobó la Ley Municipal Autonómica N°223, la cual declara al Festival de la Orquídea de Concepción como Patrimonio Natural, Cultural e Inmaterial del municipio. Esta medida reconoce la importancia del festival en la promoción de la riqueza natural y cultural de la región.
El Festival de la Orquídea, que se celebró por primera vez en 2001, fue creado por el Gobierno Municipal de Concepción y el Centro para la Participación y el Desarrollo Humano Sostenible (CEPAD), con el apoyo de la Cooperación de Extremadura, España.
Su propósito inicial fue destacar la diversidad natural y cultural del municipio, así como estimular la economía local a través del turismo sostenible. Desde entonces, el festival ha ofrecido a visitantes nacionales e internacionales una experiencia turística única y vivencial, enmarcada en el contexto del Patrimonio Cultural de la Humanidad otorgado por la UNESCO a Concepción.
La iniciativa para el Festival se enmarcó en un Plan de Dinamización Turística Municipal desarrollado de manera participativa por el CEPAD y el Gobierno Municipal, junto a diversos sectores públicos, privados y sociales del municipio.
Se identificó a la orquídea nativa Cattleya nobilior como un recurso turístico distintivo alrededor del cual se organizaron actividades temáticas como conciertos, concursos, danzas, trekking, senderismo, gastronomía, conferencias, visitas guiadas a comunidades, juegos populares, recorridos por museos, actividades deportivas, ferias artesanales, y exposición de moda chiquitana.
El evento fue destacado por su enfoque en la conservación de la orquídea, que estaba en peligro de extinción, y ha llevado a la creación de viveros, la designación de un área protegida municipal, talleres, estudios, campañas de sensibilización y la declaración de la orquídea como flor símbolo del municipio.
El impacto económico del festival es significativo, con estudios recientes post pandemia que indican que en tres días del evento se genera una cantidad de recursos equivalente a tres meses de actividad turística normal, alcanzando aproximadamente USD 300.000 distribuidos en diversos sectores económicos.
Rubens Barbery Knaudt, Presidente del CEPAD, destacó que el festival demuestra cómo, mediante un trabajo participativo y una visión a largo plazo, el turismo puede ser una alternativa viable para el desarrollo económico local en Bolivia.
Via: EL DEBER